Nuestras hormonas no operan de manera aislada. Son parte de todo un sistema muy complejo que necesita estar en equilibrio. Cuando una entra en desbalance, se genera un efecto en cadena.
Azúcar, insulina y deseo sexual
Existe un estrecho vínculo entre las hormonas sexuales, un adecuado nivel de azúcar en la sangre y el equilibrio de la hormona insulina. Los picos de insulina y, posteriormente resistencia a la insulina que resulta de comer demasiada azúcar y carbohidratos simples puede provocar acné y ciclos menstruales irregulares en las mujeres. Además de contribuir a la pérdida de cabello capilar y exceso de cabello en otras áreas del cuerpo.
Por otra parte, en los hombres puede generar agrandamiento de los pechos y disfunción eréctil entre otros desajustes.
Pero en general se nos hace difícil percatarnos de los problemas y consecuencias que el azúcar nos genera. Y asumimos que estos y otros síntomas son en realidad parte del proceso de envejecer.
Sin embargo, es importante entender que los trastornos del estado de ánimo que afectan la libido en mujeres y hombres, no son parte de este proceso. Sino más bien, son un desajuste hormonal provocado por un agente externo, en este caso, el azúcar. Y, por lo tanto, está en nuestras manos poder resolver el problema.
Los malos hábitos como beber y fumar, sedentarismo, la exposición a toxinas ambientales y el estrés crónico contribuyen al desbalance de las hormonas sexuales. Pero el principal factor de desequilibrio, es el azúcar en todas sus formas, incluidas las harinas y exceso de carbohidratos simples. Esto genera que se eleve la insulina, creando un efecto dominó de desajustes hormonales.
Una vez que comprendes el grado de desajuste que la insulina puede causar en los procesos hormonales, comienzas a entender porqué el exceso de azúcar puede destruir tu vida sexual.
5 razones porqué el excesivo consumo de azúcar destruye la libido
- El azúcar disminuye la producción de testosterona. En los hombres, la resistencia a la insulina provocada por cantidades excesivas de azúcar genera una disminución de la producción de testosterona, la hormona responsable de numerosas funciones, incluido el bienestar sexual. Tanto el deseo como el desempeño sexual se ven fuertemente afectados.
Asimismo, la disminución de testosterona puede provocar una reducción de la masa muscular y un aumento de grasa abdominal. Ese exceso de grasa corporal puede aumentar los niveles de estrógeno, lo a que a su vez provoca una disminución del deseo sexual y otros problemas como la disfunción eréctil.
El desajuste de los niveles de testosterona también afecta a las mujeres. Puede disminuir el deseo sexual y, al igual que en los hombres, puede provocar un aumento de la grasa corporal y disminuir la masa muscular. - El azúcar genera resistencia a la leptina. La leptina es una hormona que, entre otras funciones regula el apetito. Esta hormona envía la señal al cerebro de que es hora de suprimir el hambre y así, dejamos de comer.
Cuando consumes mucha azúcar, alimentos procesados y harina, la leptina pierde efectividad. Y el cerebro deja de responder a la señal de esta importante hormona.
La leptina también también cumple un rol respecto del comportamiento sexual. Un estudio en la revista Clinical Endocrinology observó a tres grupos de hombres. Y encontró que aquellos con niveles más altos de leptina, probablemente debido al desarrollo de resistencia a esta hormona, también tenían un índice de masa corporal (IMC) significativamente más alto. Asimismo, presentaban niveles más bajos de testosterona que el grupo de control. - El azúcar reduce la producción de la hormona del crecimiento (GH). La hormona del crecimiento estimula el crecimiento, reproducción celular y la regeneración en humanos y otros animales. Esta se produce principalmente durante el sueño profundo.
Esta hormona mejora la masa muscular, ayuda al cuerpo a utilizar la grasa acumulada, además de mantener la libido en niveles óptimos.
Se hace evidente que una deficiencia de esta hormona puede traducirse en:
– una reducción de la masa muscular.
– aumento del contorno de la cintura.
– un incremento del riesgo de diabetes tipo 2 y,
– disminución de la libido.
Hay estudios que demuestran que la insulina, además de afectar los niveles de testosterona y afectar nuestro deseo sexual, reduce también la capacidad de nuestro organismo para producir hormona del crecimiento. - El azúcar genera fatiga. Al llevar una dieta alta en carbohidratos, productos procesados y azúcar, terminamos aumentando la carga glicémica. Esto se traduce en una producción elevada de insulina que se vuelve crónica. Y, por lo general, la insulina compensa en exceso, reduciendo demasiado el nivel de azúcar en la sangre. Esto provoca hambre, ansiedad y fatiga. A pesar de que hayas comido hace menos de una hora.
Además, el exceso de azúcar interfiere en la producción de orexina, un neurotransmisor que regula las conductas alimentarias, la vigilia y la excitación, lo que contribuye a la fatiga y somnolencia. - El azúcar provoca estrés y ansiedad. Un consumo alto de azúcar provoca cambios de humor, depresión y ansiedad. Asimismo, la elevada producción de insulina afecta los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Cuando ambas hormonas permanecen elevadas de manera crónica en lugar de disminuir, provocan una disminución de la masa muscular, almacenamos grasa y disminuye el deseo sexual.
Recuperando el balance hormonal
Recuperar el equilibrio hormonal está directamente relacionado con lo que pones en tu boca. El alimento es información y regula la expresión de los genes, las hormonas y el metabolismo. Por eso es importante elegir alimentos que te permitan bajar la carga glicémica en tu alimentación, incluyendo todo tipo de verduras frescas, algo de fruta, frutos secos, semillas, grasas saludables y proteínas de alta calidad. De esta manera, la función de la hormona insulina y el desequilibrio hormonal que genera, volverán a funcionar correctamente.
Cómo romper con la adicción
Lograr romper con la adicción que genera el azúcar, los productos procesados y el exceso de carbohidratos es un gran desafío. Al ser una adicción propiamente tal, la fuerza de voluntad muchas veces no es suficiente.
A menudo se necesita de un método estructurado para lograr romper con este ciclo vicioso, a través del cual puedas:
- Determinar la causa raíz que nos lleva a desarrollar una relación inadecuada con los alimentos. Muchas veces este problema se genera por un nivel de insatisfacción alto en diferentes áreas de la vida en donde utilizamos alimentos que no nos convienen para llenar ese vacío. En general estas áreas están relacionadas con la ocupación/profesión, relaciones interpersonales, actividad física/movimiento, espiritualidad/propósito en la vida.
- Identificar los hábitos que ya no nos sirven y aprender a desecharlos. Asimismo, cobra mucha importancia el desarrollar nuevos hábitos que sí nos permitan avanzar en nuestro desarrollo personal.
- Implementar un estilo de alimentación acorde a nuestras necesidades individuales, siempre basado en alimentos reales en lugar de productos.
Establece objetivos, pero enfócate en crear hábitos
Es muy importante establecer objetivos claros y específicos respecto de lo que queremos alcanzar. Tal como nos recuerda Seneca, No hay viento favorable para el barco que no sabe adónde va.
Cuando tenemos una visión clara respecto de dónde queremos llegar, las posibilidades se vuelven más reales. Cuando nos comprometemos con nuestros objetivos, nos hacemos imparables.
Pero, sin importar cuan bien hayas establecidos tus objetivos, si no te enfocas en desarrollar y cimentar los hábitos diarios para lograrlos, nunca los alcanzarás.
Entonces, lo importante es tener nuestros objetivos presentes, como una especie de brújula, pero el foco debe estar en hacer el trabajo diario requerido para llegar al destino.
Espero que estos 3 tips te sean de ayuda para este 2023 que se aproxima, y así hagas del nuevo año, el mejor de tu vida.
excelente articulo los felicito y agradecido por tan invauable informacion en provecho del bienestar de las personas que buscan un cambio para bien en su vida y la de todos …
Muchas gracias Andrés! Que bueno saber que la información que presentamos te es de ayuda.
saludos,
Matías
excelente informacion …gracias
deberian de profundisar mas este tema que es escaso
¡Gracias José!
Gracias por sembrar conciencia sobre ese veneno dulce
Excelente articulo, tengo resistencia a la insulina, diagnosticada hace poco, ahora comprendo muchas cosas que me ocurren.
Felicitaciones.
Excelente…. Muy interesante, felicitaciones.