Introducción

Debemos partir de la base que nuestro cuerpo no “sabe” si tiene o no sobrepeso. Lo que si sabe, es que debe cuidar sus reservas energéticas de la mejor manera posible. Por lo tanto, cuando buscamos bajar de peso comiendo de manera intuitiva, es muy probable que rápidamente terminemos comiendo según nuestros requerimientos para mantener peso. Aunque sea una alimentación saludable.

3 opciones para medir tu ingesta calórica:

  1. Medir tu ingesta calórica y nutricional: esta es la manera más precisa de medir tu alimentación, y así asegurarte de que estás generando las condiciones para perder peso, preservando masa muscular.
    Necesitarás una báscula o gramera para pesar tus alimentos y luego registrarlos en una aplicación como myfinesspal o fatsecret.
    Este enfoque es también una buena oportunidad de entender cuánto comemos y qué nos aportan los alimentos que ingerimos. No obstante, no es recomendable para uso de largo plazo.
  2. Metodología Tus Manos, tu porción: a través de este innovador sistema puedes estimar tu ingesta calórica y nutricional, de manera sencilla y efectiva, simplemente utilizando tus manos para estimar las porciones de cada macronutriente. Es importante utilizar platos sencillos para lograr una buena estimación.
    Si bien esta metodología tiene un menor nivel de precisión que el seguimiento de macronutrientes, es lo suficientemente precisa como para ayudarte a realizar un seguimiento constante de tu ingesta de alimentos y así alcanzar tus objetivos.
  3. Diagramas de platos: simplemente seguir los diagramas de platos que destacamos en el taller y, modificar las cantidades conforme avanzas hacia el logro de tus objetivos. Asegúrate eso sí, de lograr tus requerimientos de proteínas.

Sin importar la metodología que utilices, es importante que estimes tu ingesta calórica antes del consumo de tus alimentos, para que así te asegures de cumplir con los parámetros calóricos y nutricionales para la pérdida de peso.