Esta etapa es de gran importancia, pues te ayudará a esclarecer cuál es la base desde la que comienzas y cuáles son los principales factores que te han llevado a esta situación que te gustaría mejorar. Te permitirá reflexionar acerca del estilo de vida y alimentación que actualmente llevas y te facilitará desentrañar cuál es el origen de tus problemas o dolencias.
El objetivo de esta evaluación es entender qué áreas de tu vida podrían requerir de mayor atención de tu parte en este momento y que podrían estar influyendo en tu relación con la comida. Asimismo, buscaremos identificar las razones por las cuales muchas veces se nos hace difícil implementar cambios en nuestra vida y, en particular, respecto de la alimentación.
Para esto utilizaremos dos herramientas:
Hay aspectos de tu vida que necesitas transformar que son muy fáciles de identificar, como por ejemplo tu peso actual. Si estás descontento con tu peso, este factor saltará a la vista como una variable que requiere atención. Sin embargo, hay otros aspectos de tu vida que son importantes de considerar y que podrían estar influyendo enormemente en cómo llevas tu alimentación, pero que son mucho más sutiles y, por lo tanto, más difíciles de identificar. Estos ámbitos están relacionados, de manera usual, con los llamados “alimentos primarios”.
Este concepto fue desarrollado por Joshua Rosenthal, fundador del Institute for Integrative Nutrition (IIN), de Nueva York, y se basa en que la nutrición es una fuente secundaria de energía. Los alimentos primarios o fuentes no alimentarias de nutrición son las que realmente nos satisfacen. Los niños son un buen ejemplo, cuando vibran al jugar y al conocer cosas nuevas. Los enamorados se alimentan de la pura felicidad y la paz en que viven, mientras que los empresarios apasionados se nutren de sus trabajos. La emoción y el éxtasis de la vida cotidiana nos pueden alimentar de forma más completa que cualquier alimento.
Los alimentos primarios no están en un plato, pero nos nutren en un nivel más profundo. Los cuatro principales alimentos primarios son:
Mientras nuestros alimentos primarios estén en balance, menos dependeremos de los secundarios para sentirnos bien. Y, por el contrario, cuanto más nos llenemos de alimentos secundarios, menos espacio dejaremos para los primarios, que son nuestra verdadera fuente de nutrición. Es interesante cómo diversas religiones y culturas practican el ayuno, con el fin de abrir diferentes canales para recibir una mayor cantidad de alimentos primarios.
Para saber qué áreas de tu vida pueden estar necesitando un poco de atención, es fundamental darse tiempo de calidad para explorar tu equilibrio personal entre la alimentación primaria y secundaria.
Este ejercicio a continuación te ayudará a conectar tus prioridades y, por consiguiente, definir tus metas y objetivos. Es muy fácil de realizar. Solo debes seguir los siguientes pasos:
El listado de acciones que desarolles deberás incluirlo en tu plan de acción general que veremos más adelante.
En el video a continuación te explicaré con un ejemplo cómo completar tu ejericio Tu Vida en Balance.
Descargar evaluación Tu Vida En Balance
Inmunidad al cambio
Muchas veces nos preguntamos ¿por qué no puedo cumplir lo que me he propuesto? ¿Por qué se me hace tan difícil cambiar? Por ejemplo ¿por qué no puedo dejar el azúcar? ¿Por qué no puedo adherir a las recomendaciones del médico para bajar de peso?
No te preocupes, esto le sucede a la gran mayoría de nosotros y es absolutamente normal.
En la mayoría de las situaciones de estancamiento intervienen barreras mentales como límites al desarrollo personal. No se trata tanto de una cuestión de poder, como de querer o creer poder.
Estas barreras que nos hemos auto-impuesto de manera inconsciente, nos llevan a generar comportamientos que obstaculizan el cumplimiento de nuestros objetivos, pues hemos generado un compromiso interno oculto, para no lograrlas.
Este concepto se denomina Inmunidad al Cambio y fue desarrollado por los sicólogos norteamericanos Robert Kegan y Lisa Laskow Lahey, de la Universidad de Harvard, quienes además crearon un práctico modelo plasmado en su libro Inmunidad al cambio, para desentrañar estos compromisos ocultos que hemos creado y que nos impiden cambiar.
En el video a continuación te explicaré con un ejemplo cómo llenar la matriz de Inmunidad al Cambio. Luego deberás completar tu matriz de Inmunidad al cambio que encontrarás más abajo. Una vez completa, puedes enviarla a tu correo para que vayas monitoreando cómo avanzas durante el programa.
El listado de acciones que desarrolles deberás incluirlo en tu plan de acción general que veremos más adelante.